El pasado viernes 12 de abril, la décima edición de Guatemala Fashion Week nos deslumbró con una pasarela repleta de moda veraniega, marcando el punto culminante de la temporada con el lema “Every summer has a story”. El evento tuvo lugar en la finca San Cayetano, en La Antigua Guatemala, y estuvo lleno de creatividad, música, buena vibra y, por supuesto, mucha moda.

Diseñadores nacionales e internacionales, así como amantes de la moda, se reunieron para apreciar las diversas colecciones de la temporada. La pasarela comenzó con la colección de Steinvorth Attire, una marca costarricense que considera la ropa como algo más que un simple adorno. Inspirada en la naturaleza, la marca se dedica a la artesanía y el detalle, exhibiendo una variedad de prendas, arte y objetos de diseño atemporales, todos elaborados con tejidos orgánicos y sostenibles.

Ricardo Batz, con su colección Monochrome Cruise para la marca Sharkar, presentó siluetas clave con estructuras simples y tejidos frescos para los días de calor, creando una colección de esenciales elevados, todos en tonos rojos para un verano salvaje. El diseñador indicó que esto era un tributo a sus raíces y ancestros del Altiplano Occidental de Guatemala.

Pamela Estrada, especializada en diseño de accesorios, y Sofía Porras, enfocada en diseño de moda, crearon la marca Boibá, inspirando a otros a vivir en el presente y disfrutar de los pequeños momentos de la vida. Su primera colección, La Tardeada, captura la esencia de una tarde entre amigas, buscando demostrar e invitar a abrazar la esencia relajada de una tarde bohemia, donde los diseños atemporales se contrastan con escenas de espontaneidad y felicidad.

F4SE, una marca que desafía los parámetros tradicionales, presentó Todo es Cíclico, una colección audaz que exhibió la inmersión del ser en su propia psiquis. Esta colección se manifestó a través de un conjunto de siluetas relajadas, utilitarias y ornamentales que representan a un hombre saliendo de su sueño más profundo.

El desfile concluyó con el innovador diseñador guatemalteco Eduardo Figueroa, quien presentó diseños creados con materiales como el lino y la seda. Utilizando conceptos extraídos de su colección anterior, Nicté Primavera/Verano, Figueroa plasmó una paleta de colores que va desde el blanco sólido hasta un estampado multicolor, reinterpretando los florales de manera única.